-Entras a una panadería y sabiendo que llegaste de último te “coleas” ignorando la fila que esta esperando ser atendida. "Si es apenitas una canilla, eso es rapidito", argumentas.
-Te comes el semáforo porque eres vivísimo. A nadie se le ocurrió burlar las normas. Sólo a ti. Allá ese montón de zoquetes que todavía están esperando que la luz cambie. Jajajaja yo si soy vivo.
-Entras al metro y te sientas en los puestos asignados a personas de tercera edad, ancianos y minusválidos.
-Cuando detienes el auto porque la luz del semáforo cambió a rojo, no respetas el paso de peatones. Total, pueden caminar delante, detrás o de lado, lo tuyo es arrancar de prisa porque si el conductor de al lado aprovecha unos centímetros ¿Por qué tu no? ¿Acaso eres más pendejo?
-Llegas de último a esperar que llegue el vagón del metro pero te pones de primero en las líneas amarillas porque eres vivísimo, cuando te reclaman tu respuesta es: "eso era antes ahora uno pasa cuando puede y quiere".
-Cuando la cajera te devuelve dinero de más y te das cuenta te haces el tonto. Si ella te reclama le dices que no que esta confundida que te dio el vuelto completo. ¡Que golilla! "Comí a mitad de precio".
-Si te nombran para un cargo público estas ansioso esperando ver con cuanto te puedes quedar. Serias bien pendejo si sales de allí sin haberte quedado con nada. Si otros los hacen ¿por que yo no? ¿Te imaginas la raya?
Chico ¿estuviste en un tremendo cargo público con esa bola de real en tus manos y no te quedaste con nada? Si eres bien pendejo.
-Caminas por el boulevard y después de comerte el helado te deshaces de eso tirándolo al piso porque ¿Quién va a cargar con ese fastidio?. Las cestas de basura están allí pero es mas rápido dejarlo caer y te quitas eso de encima.
-Eres gerente de una empresa y tienes a tu cargo a un montón de gente que te teme. Todo el tiempo les dices que su trabajo no es bueno y que no sirven para nada. Además los obligas a quedarse mas allá de las ocho horas laborales y a llevarse trabajo a su casa porque los cargas con el trabajo que deberían hacer tres personas y no una.
-Eres dueño de un local donde se imparten terapias de la Nueva Era. Una de los terapeutas que te pagan mensualmente por el uso del espacio te hace una terapia para ti, durante dos horas porque estas cansado o enfermo.
Al fin de mes le pagas solo una hora o no le pagas la terapia que te hizo a ti, argumentando que eres el dueño y que no debe cobrarte.
¿Les parece familiar estos casos?
El robo no se refiere únicamente al que comete el ladrón que asalta en la calle o a la pandilla que asalta en un banco para llevarse el dinero. En los ejemplos que expusimos anteriormente hay robo de dinero, hay robo del tiempo, energía, espacio y autoestima de los demás.
Cuando decimos “los demás” no significa que están de-más. Es decir, las otras personas tienen un espacio, tiempo, dinero, energía, dignos de respeto.
Si yo sustraigo de los demás “su derecho a estar”, como vimos en los ejemplos anteriores, estoy enviando un mensaje claro y preciso a mi mente. “Tengo que quitarle a otro porque yo no soy capaz de atraerlo por mi mismo.”
Estas múltiples maneras de pensar y actuar, solo atraen escasez.
Ninguna cuenta queda sin saldar en el plan universal. La contabilidad del Universo es precisa. Lo que es sustraído a otros lo perdemos por otra vía sencillamente porque “lo debemos”. Porque el pensamiento de escasez, atrae escasez.
Si luego de quitarle a la cajera el vuelto correcto, resulta que en un mes alguien se lleva el reproductor de tu carro, no es mala suerte, no es Dios, no es el destino ni la inseguridad. Es lo que se llama Ley de Compensación. Es la ley universal que tiende al equilibrio de las cosas.
Posiblemente no veamos el efecto inmediato en nosotros sino en las personas que queremos:
¿Por qué mi hijo no obtuvo el empleo?.
¿Por que no me aprobaron el sobrino en la Universidad?
La idea del proyecto la tuve yo en la oficina pero el reconocimiento se lo dieron a otro…
No me pagaron las horas extras completas…
¡Que injusta es la vida!.
¿Y no fuiste injusto cuando te dieron un cargo público y privaste del pago a miles de familia que tenían que sostener a sus hijos?
¿Y no fue injusto que la cajera tuviera que pagar de su bolsillo la comida tuya a fin de mes?
¿Y no es injusto disponer a tu antojo del tiempo de otros haciendo que trabajen para ti todo el tiempo sin razón ni medida?
Así sucesivamente se desencadenan una serie de acontecimientos de los cuales cada quien, con sus propios actos y pensamientos, es responsable.
¡Ah¡ pero yo veo que fulano es feliz y robó lo que quiso y no le pasó nada.
No le pasó nada que TU SEPAS.
¿Cómo mides la felicidad del otro?.
Tiene dinero, casa, carro y con eso ya es FELIZ
¿Cómo sabes?
Si vieras por un agujerito su vida personal, sus temores, afectos, fracasos, triunfos y pesares, tu idea sería diferente.
Si vieras la relación directa entre tus actos y las consecuencias para ti y tus seres amados, lo pensarías mejor ¿verdad?
El verdadero tema acá es ¿Por qué la amenaza del castigo debe ser la que guíe tus actos?
Nuestros actos deben suiarse por una conciencia de reverencia profunda a la vida y a la dignidad del otro; el respeto a su tiempo, dinero, espacio y autoestima.
El principal respeto es hacia ti mismo. Cuando robas, quitas o sustraes te estas tratando como a alguien incapaz y fracasado. Estas haciendo pública una declaración de Inferioridad ante los demás, pero sobretodo ante ti mismo. El pensamiento intrínseco en estas acciones es: “No sirvo para nada”.
Debemos cambiar la calificación que hacemos de nosotros mismos.
Tengamos fé en nosotros mismos y en nuestras capacidades y talentos para alcanzar nuestras metas. Hay espacio para todos, no es necesario atropellar a nadie.
Por un mundo mas humano lleno de amor y respeto,
Hasta la próxima entrega,
Transcribo la letra de una SALSA de Alberto Cortes titulada: Los demás.
Nunca estamos conformes del quehacer de LOS DEMAS,
y vivimos a solas sin pensar en LOS DEMAS,
como lobos hambrientos acechando a LOS DEMAS,
convencidos que son nuestro alimento LOS DEMAS.
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Los errores son tiestos que tiraron LOS DEMAS,
los aciertos son nuestros y jamás de LOS DEMAS,
cada paso, un intento de pisar a LOS DEMAS,
cada vez más violento el portazo a LOS DEMAS.
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Las verdades ofenden si las dicen LOS DEMAS,
las mentiras se venden cuando compran LOS DEMAS,
somos jueces mezquinos del valor de LOS DEMAS,
pero no permitimos que nos juzguen LOS DEMAS.
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Apagamos la luz que por amor a LOS DEMAS,
encendió en una cruz el que murió por LOS DEMAS,
porque son ataduras comprender a LOS DEMAS,
caminamos siempre a oscuras sin pensar en LOS
DEMAS.
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Nuestro tiempo es valioso pero No el de LOS
DEMAS,
nuestro espacio es precioso pero no el de LOS
DEMAS,
nos pensamos pilotos del andar de LOS DEMAS,
donde estemos nosotros que se aguanten LOS
DEMAS.
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Olvidamos que somos LOS DEMAS de LOS DEMAS,
que tenemos el lomo como todos LOS DEMAS,
porque son tonterías escuchar a LOS DEMAS,
LO TILDAMOS DE MANIA AL AMOR POR LOS DEMAS....
Alberto Cortés
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