
Quisieras poder ordenar al sol que deje de brillar,
al cielo que se tiña de rojo y a las aves que
detengan su canto.
Pero no puedes
Quisieras poder ordenar a la tierra que escupa flores por
donde tu pisas, al aire que no cese de murmurar tu nombre y
a los peces que sigan el rastro por donde tú pasas.
Pero no puedes
Quisieras poder ordenar un súbdito en cada nuevo alumbramiento,
ordenar a los hombres que se alimenten con las míseras sobras de tu vanidad
y a los astros que cambien su orbita para que no cesen de escribir tu nombre.
Pero no puedes
Quisieras poder ordenar al todopoderoso que doble su rodilla en tu presencia,
a los ángeles que sostengan tu corona y a las estrellas que adornen tu cetro
con su luz.
Pero no puedes.
Quisieras ordenar la vida y la muerte para ahogar la ira de tu arrogancia no correspondida,
la impotencia de tu voluntad no satisfecha y
la garganta del valiente que se atreve a decirte que NO.
Pero no puedes.
Quisieras poder, pero no puedes…
4 comentarios:
liliana, por casualidad me meti hoy en tu blog y lei tu articulo, me parecio excelente. me sorprendieron tus palabras, realmente le has dado un sentido poetico al sentimiento de muchos. te felicito
Muy bueno Lilisú, "no le dijiste perro pero le enseñaste el tramojo" como dice el refrán. Mis cariños para tí en el día de San Valentín y sigue escribiendo para darnos el ejemplo a Julián y a mí.
Releyendo tu escrito se me ocurre que deberías darle mayor divulgación. Creo que te hablé de una columna en "Tal Cual" que publica lo que envían sus lectores. Creo que se llama "Libremente" o algo así. ¿Por qué no lo intentas?
Elocuente poema que permite ir dibujando en nuestra mente personajes varios y alguno muy específico. El contenido tiene aplicación universal, va más allá de los límites que nuestra mente pueda imponer.
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